domingo, 22 de mayo de 2011

Orar y más orar

Cuando escuchamos noticias tan impactantes de lo que está sucediendo en nuestro país y en el mundo entero, cuando tenemos grandes situaciones en nuestra familia, trabajo, iglesia, tenemos que orar.  


LA DESESPERANZA
Es un arma que el enemigo, el demonio le agrada atacarnos.  Cuando tenemos problemas nos llega este sentimiento de que  lo que tenemos que hacer pero no podemos hacer, lo que otros deben hacer, lo que queremos decir, y caemos en una maraña de pensamientos tan confusos, de decisiones  que tenemos que tomar.  Muchas veces nos cuesta amanecidas, pérdidas de sueño en esta angustia.  Entonces no nos dimos cuenta de que pecamos contra el primer mandamiento.  Amar a Dios sobre todas las cosas.  Si lo amáramos, sobre cualquier asunto, problema, circunstancia, enfermedad y confiaramos que Dios todo lo puede,no viviéramos angustiados y deprimidos.

ORAR Y CONFIAR
 Oramos para comunicarnos con Dios.  Confiamos en que nos escucha y creemos que nos ama y quiere lo mejor.  Creemos que somos una obra creada por ÉL y que nos conoce y ve lo que no vemos.

Si orara a Dios y esperara  su respuesta  cuando tengo problemas con mi esposo, evitaríamos tantas oportunidades de no tener que decir nada hiriente, nada innecesario hacia el esposo.  
Si orara más a Dios y espero que actúe, cuando tengo problemas con mi hija o hijo, evitaría decirle tantas palabras  que no nos llevan a nada.

Cuando sientas esta desesperación, tan horrible que te perturba el sueño, ora a Dios.  Habla y dile lo que te preocupa.  Es el mejor momento de hacer una oración de alabanza y cantar alabanzas.  Enciende tu radio con alguna música sacra y alaba a Dios en esos momentos.  ¿Por qué? porque se alaba en todo momento.

 Bendeciré al SEÑOR en todo tiempo; continuamente estará su alabanza en mi boca.  En el SEÑOR se gloriará mi alma; lo oirán los humildes y se regocijarán.  Engrandeced al SEÑOR conmigo, y exaltemos a una su nombre. Salmo 34, 1-3


¡Es tan bueno estar con Jesús!  Alabar a Dios, adorarlo y visitarlo por los que no van, para reparar las ofensas que día a día sufre Jesús es una decisión, que debes implantar en tu vida.  Casi todas nuestras parroquias ofrecen una vez a la semana el tiempo para la Exposición de Jesús  Sacramentado.  Hay libros preciosos que de tienen oraciones de adoración a Dios.  Nuestra biblia tiene salmos y oraciones de adoración.  Se invoca al Espíritu Santo para que nos ayude a realizar las oraciones.  

En estos momentos en que vivimos, que vemos a diario los peligros que nos asechan, ¡qué mejor que ir al Santísimo a adorarlo! para hablarle sobre nuestros hijos, esposos, familia, trabajo, tristezas.
Asiste a la iglesia  y busca su presencia en el Santísimo Sacramento.  Jesús se quedó en las especias de Pan y Vino para estar con nosotros y nos espera. La experiencia de estar a solas en silencio en la iglesia con Jesús es pacificadora. Te llena de paz.  
 Hay libros con oraciones y lecturas bíblicas para la visita al Santísimo.  He podido utilizar :  Devocionario Eucarístico de las Paulinas.







Tiene la hora santa por la familia, por los jóvenes, por la paz, entre otras.
  Jesús, maestro Eucarístico de Marie Paul Curley Fsp.  Este libro tiene, La hora de encontrar al maestro, Jesús el Buen Pastor, Pan de vida, Luz del Mundo, y tiene otras oraciones muy apropiadas. 

 Estos libros tienen oraciones preciosas, citas bíblicas, salmos, peticiones.  Busca ir a una Vigilia donde dejan la iglesia abierta todo el día y noche.  Otras parroquias dedican el Jueves o Viernes a una hora de adoración.  
Cambia el hábito de llorar, quejarte, discutir, volver a quejarte, dar discursos, por acercarte a Jesús.   Deja tus preocupaciones en el altar y vete en paz y confianza de que Ël, todo lo puede y ve lo que no vemos.  Recuerda que Dios te hizo  con un propósito maravilloso.  Dios quiere lo mejor para ti. 












No hay comentarios: